Las empresas están viviendo momentos complicados. La situación económica mundial es cada día más difícil, y sus efectos están siendo devastadores.
La incertidumbre se ha adueñado de todos los aspectos de la vida, y está sacudiendo con especial dureza la actividad de las empresas. Pedidos, proyectos, inversiones, se cancelan o posponen cada día.
Las empresas afrontan situaciones difíciles, de reducción de pedidos, tensiones de tesorería… viven el día a día con la vista puesta en el futuro pero no parece haber grandes certezas sobre cómo van a evolucionar las cosas.
En este contexto surge una pregunta: ¿merece la pena invertir en digitalización?
Si se analiza con la claridad que nos da la necesidad, la pregunta tiene una sencilla respuesta: Sí. Pero con matices; Hemos de invertir en digitalizar aquello que verdaderamente importa, aquello que ayude a las empresas a ser mejores, en el sentido más amplio de la palabra.
Para ello es fundamental realizar un buen diagnóstico previo y fijarnos en cuatro grande áreas: aumentar la facturación, reducir costes, fabricar más eficientemente y tomar mejores decisiones. Todo lo demás, otros aspectos, se cancelarán o pospondrán hasta tiempos mejores.
Analicemos con un poco más de detalle cada una de estas áreas
Vender más
Todas las empresas quieren vender más. En estos momentos de crisis no sólo es difícil generar nuevas oportunidades, sino que además, nuestros clientes, cancelan pedidos, y son mucho más reacios a activar nuevos. Con todas las restricciones que hay, es muy complicado acercarnos y que conozcan nuestras propuestas.
Por ello, es fundamental desarrollar e implementar soluciones digitales que nos permitan generar más demanda. Nuevas soluciones que nos permitan acceder a nuestros clientes, que pongan nuestra propuesta de valor en el gran escaparate de internet, que permita que los clientes potenciales configuren según sus necesidades sus propios productos.
Reducir costes
Optimizar los sistemas e infraestructuras informáticas. Ser más eficientes en todos los departamentos siendo capaces de reducir los costes directos y las horas improductivas con herramientas digitales que nos ayuden en nuestras operaciones financieras.
Hay herramientas tecnológicas como repcon invoices que facilita y agiliza la gestión de facturas dentro de la organización. Disponer de los sistemas de gestión apropiados que nos permitan tener control sobre nuestros almacenes, stocks, logística, es fundamental para garantizar la eficiencia de las tareas.
Fabricar mejor
Ser más productivos, digitalizar los procesos es fundamental para fabricar mejor, para aumentar la calidad del producto y del proceso. Para ser más eficientes… para predecir los errores y poder solucionarlos antes de que se produzcan.
Tomar las decisiones correctas
Hoy en día hay herramientas para poder decisiones de forma correcta. Desde el sempiterno Excel hasta soluciones de analítica predictiva basadas en machine learning, la analítica es clave para poder tomar las decisiones acertadas.
Cuando hablamos de datos no estructurados como la experiencia o el know-how de una empresa, ¿cómo gestionamos el conocimiento que fluye por la empresa?, en esos casos necesitaremos buscar una solución digital como repcon KRP que nos permita gestionar y acceder al mayor activo de una empresa, el conocimiento.
Es claro que necesitamos avanzar en la Transformación Digital, pero debemos hacerlo con un buen diagnóstico previo, y teniendo siempre en cuenta el objetivo final: ser más eficientes para cumplir, mejor, los resultados de la empresa.
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José Ramón Valle Belio
Director de Marketing